(miComunidad.com) En Lucas 22:36, Jesús pronuncia una frase que ha generado mucha controversia y debate a lo largo de los siglos: “…el que no tenga espada, venda su manto y compre una.” A simple vista, estas palabras parecen contradecir todo lo que conocemos sobre Jesús: su llamado a la paz, a amar a los enemigos, a poner la otra mejilla. Más adelante, en ese mismo capítulo, Jesús reprende a Pedro por usar una espada durante su arresto (Lucas 22:49–51). ¿Por qué, entonces, este aparente doble mensaje? ¿Estaba Jesús animando a sus discípulos a armarse?
Para entender esta frase, es fundamental considerar el contexto en el que fue dicha. Jesús está celebrando la Última Cena con sus discípulos. Este momento no solo es íntimo, sino también profundamente solemne: es el cierre de su ministerio público y el inicio de su camino hacia la cruz. Hasta ese punto, Jesús había enviado a sus discípulos a predicar sin provisiones, sin dinero, sin armas, y milagrosamente nunca les faltó nada (Lucas 22:35). Pero ahora, el panorama está cambiando.
Leer más
Debe iniciar sesión para leer el resto de este artículo. Por favor inicie sesión o regístrese como usuario.